Mariel y David

Nosotros, nos casamos el 29 de septiembre de 2012, empezamos a organizar nuestra boda con tan solo 6 meses de antelación, muy poco tiempo teniendo en cuenta que agosto no cuenta. Lo primero fue encontrar el lugar perfecto donde compartir con nuestros seres queridos y allegados preferidos un momento tan importante de nuestra historia. No fue sencillo pues la mayoría de las parejas en Madrid reserva con un año de antelación. En nuestro caso, no se si fue la suerte o el destino o la pura casualidad que a nuestro correo de consulta de disponibilidad de fechas lo contestó Daniela Da Pozzo. Desde un primer momento, sin conocernos de nada fue muy cercana, algo important​í​simo para nosotros, que inmersos en los preparativos de la boda eramos todo nervios, queríamos que todo fuera perfecto y contar con una voz amiga es esencial en momentos como ese donde los tiempos son cruciales, contestar con rapidez a consultas concretas y
estar siempre disponible para ayudarnos a elegir y aconsejarnos en lo que fuera necesario fue clave para decidirnos y para organizar un día tan especial. A priori pensamos que no podríamos sorprendernos más y que la celebración discurriría con normalidad asumiendo fallos y meteduras de pata dentro de los límites normales, pero para nuestra sorpresa llegó el día que tanto esperábamos y todo, absolutamente todo salió a la perfección, ella se encargó de organizarlo todo, por poner un ejemplo, la música elegida en el momento adecuado dio como resultado
instantes y hoy en dia recuerdos inolvidables, el servicio parecía que se movía al compás al servir los platos en las mesas, nos sentimos arropados y tan seguros y confiados como si fuéramos parte de la familia e hizo que aquel día fuera realmente perfecto, incluso a pesar de habernos llovido un poco… No podemos más que agradecer el esfuerzo, la cercanía y la dedicación, organizar como si
fuera para ella misma algo que en realidad era para unos desconocidos pero que con tanto mimo hizo de aquel día un día de ensueño.